Datos sensibles: Son aquellos que afectan la intimidad del titular y el proponente, cuyo uso indebido puede generar su discriminación, tales como aquellos que revelen el origen racial o étnico, la orientación política, las convicciones religiosas o filosóficas, la pertenencia a sindicatos, organizaciones sociales, de derechos humanos o que promueva intereses de cualquier partido político o que garanticen los derechos y garantías de partidos políticos de oposición así como los datos relativos a la salud, a la vida sexual y los datos biométricos.
Información sensible: Es aquella cuya revelación, alteración, pérdida o destrucción puede producir daños importantes a la organización propietaria de la misma. En ocasiones, la pérdida de información sensible puede producirse accidental o malintencionadamente, pero, en cualquier caso, puede y suele acarrear un daño económico y de prestigio, afectando a la empresa.
La información sensible se encuentra constitucionalmente protegida por ser información privada (Art 15. Constitución Política), pero también por ser parte del secreto industrial o empresarial de BIOFIX BIC, según la Decisión 486 de 2000, particularmente, en el artículo 260.