En el contexto de la lucha contra el cambio climático y la conservación de la biodiversidad, los manglares juegan un papel fundamental como sumideros de carbono y protectores de la costa. Colombia, con su vasta extensión de bosques y áreas costeras, es un escenario clave para la implementación de iniciativas que busquen tanto la mitigación del cambio climático como el desarrollo sostenible de las comunidades étnicas que habitan estos territorios. En este ámbito, los proyectos REDD+ (Reducción de Emisiones por Deforestación y Degradación de los Bosques) desarrollados por BIOFIX, en colaboración con comunidades locales, son un ejemplo claro de cómo la conservación de los ecosistemas puede generar beneficios múltiples.
A través de proyectos como Cocoman Frontera, Delfines Cupica y Naya, BIOFIX, en asocio con consejos comunitarios, se ha consolidado como un actor clave en la conservación de 5,271 hectáreas de manglar en la región del Pacífico colombiano. Estas iniciativas no solo protegen la biodiversidad, sino que también proporcionan un medio de vida crucial para las comunidades afrodescendientes que dependen de los recursos marinos, como la piangua, los cangrejos y camarones, para la pesca artesanal y su seguridad alimentaria. Además, los manglares actúan como barreras naturales contra las tormentas y la erosión, protegiendo las costas y mejorando la resiliencia de las poblaciones locales ante los efectos del cambio climático.
Uno de los aspectos más destacados de estos ecosistemas es su capacidad de almacenar grandes cantidades de carbono. Los manglares, considerados sumideros de Carbono Azul, tienen la capacidad de almacenar hasta tres veces más carbono que los bosques tropicales. En el caso de los proyectos gestionados por BIOFIX, se ha demostrado que los manglares en América Latina y el Caribe pueden almacenar un promedio de 514.81 toneladas de carbono por hectárea. Esta cifra es significativamente mayor que el almacenamiento promedio de carbono en otros ecosistemas terrestres de Colombia, como el Caribe (176 tC/ha) y el Pacífico (173 tC/ha).
Además de sus beneficios ambientales, los proyectos REDD+ de BIOFIX son una oportunidad valiosa para las empresas que buscan compensar sus emisiones de carbono y alinearse con los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Al invertir en créditos de carbono generados por la protección de manglares, las empresas no solo mitigan su impacto ambiental, sino que también apoyan la conservación de ecosistemas clave y mejoran la calidad de vida de las comunidades locales.
En un mundo donde la necesidad de acción climática es cada vez más urgente, los proyectos REDD+ como los gestionados por BIOFIX demuestran que es posible encontrar soluciones integrales que beneficien tanto a la naturaleza como a las personas. Los manglares del Pacífico colombiano son un ejemplo vivo de cómo la conservación de los ecosistemas puede convertirse en una herramienta esencial para mitigar el cambio climático y promover el desarrollo sostenible.
Para obtener más información sobre los proyectos de BIOFIX y cómo su empresa puede compensar sus emisiones a través de la protección de manglares, visite www.biofix.com.co o contáctenos en operaciones@biofix.com.co.